Entrevistamos a Javier Lacunza, responsable de Baluarte y vicepresidente de APCE

‘Nuestros amplios espacios, flexibles y con gran capacidad de transformación, representan una muy importante clave de diferenciación’

‘Nuestros amplios espacios, flexibles y con gran capacidad de transformación, representan una muy importante clave de diferenciación’

Dentro de nuestra serie de entrevistas para conocer el estado de los Palacios de Congresos, su adaptación y transformación a los nuevos tiempos que marca la pandemia, hoy entrevistamos a Javier Lacunza, responsable de Baluarte y vicepresidente de APCE.

Continuamos con nuestra serie de entrevistas a los responsables ejecutivos de la Asociación de los Palacios de Congresos de España para conocer, de primera mano, cómo está afectando la crisis sanitaria al sector de los eventos y a la actividad de los palacios miembros, así cómo para conocer sus expectativas y valoraciones sobre cómo se está preparando el sector de cara al futuro más inmediato. Tras María del Mar Carnero, directora de Congresos de Fibes Sevilla, hoy entrevistamos a Javier Lacunza, máximo responsable de Baluarte, Palacio de Congresos y Auditorio de Navarra.  

¿Cuáles son sus atribuciones y competencias centro del Comité Ejecutivo de APCE?

 

Soy vicepresidente de APCE. Al margen de las responsabilidades generales de los miembros del Comité Ejecutivo, dentro de la distribución de proyectos dentro del Comité me encargo de los relacionados con reporting, bases y análisis de datos.

Desde su posición, ¿cómo cree que se están adaptando los Palacios de Congresos a esta nueva situación? ¿La realidad más inmediata va a ser la apuesta por los eventos híbridos?

 

Creo que hay cuatro áreas en las que distribuir los aspectos netamente incrementales sobre lo que ya hacíamos: Negocio, uso de espacios, hibridación tecnológica y dimensión social incremental de nuestros centros:

1.-  Al margen de la difícil situación a nivel de explotación económica de nuestros centros ahora mismo, albergo una esperanza de un valor premium de la presencialidad, que pueda trasladarse a precio y márgenes de explotación.

2.- Nuestros amplios espacios, flexibles y con gran capacidad de transformación,  son una clave de diferenciación muy fuerte, realzada por la crisis sanitaria que obliga y obligará a espacios más amplios, calidades de aire, trazabilidad y control.

3.- La dimensión tecnológica complementa y no sustituye a la más que necesaria presencialidad. Facilitar esa hibridación es condición sine equa non para nuestros centros.

4.- Y en cuanto a la dimensión social, creo que el esfuerzo hecho por muchos de nosotros en el apoyo a autoridades sanitarias, administraciones públicas y colectivos en este período nos ha dado aún más razón de ser.

Como para cualquier sector, los meses más duros de la pandemia y del confinamiento entendemos que sirvieron para reflexionar y adaptarse a la nueva realidad venidera. Lo que no suele permitir la rutina y vorágine del día a día. ¿Ha servido ese tiempo para marcar la línea estratégica de actuación y transformación de los Palacios?

 

Absolutamente. Proyectos que se quedaban en “cola de espera” han podido ver luz: Mejora en análisis de datos, marketing online, reparaciones y mejoras, mayor integración de las herramientas de comunicación multimedia… Y ciertamente, tiempo para pensar en reformulaciones de planes estratégicos

¿Cómo describiría el estado actual y el futuro más inmediato en el que se encuentra el sector de los eventos?

 

Muy afectado, pero con algo de luz al final del túnel. El cultural ha avanzado más rápido que el MICE en este período, y nos da algunas lecciones de aplicación.

Por último, ¿qué mensaje final enviaría a quienes se preguntan por la seguridad, adaptación y profesionalidad que se aporta desde las instalaciones de los Palacios miembros de APCE?

 

Puedo hablar de nuestro caso. En Baluarte tenemos trazado de asistencia a eventos culturales (llegando a las 775 personas, 50% de capacidad, en el caso del auditorio principal) con cribados preventivos de asistentes adyacentes a positivos COVID desde el regreso a la operativa tras la segunda ola (16 de diciembre) de manera ininterrumpida. A final de abril de 2021 llevaremos unas 40.000 personas, 60 sesiones culturales, 88 trazados preventivos y si todo sigue como hasta la fecha, 0 casos de propagación. Los datos son incontestables. Para conseguirlo: ventilación forzada al 100%, medición constante de calidad de aire interior, modificación de accesos al edificio triplicando el número de puertas, orden y rigor en entradas y evacuaciones, replanificación de seating/ticketing con trazabilidad total, limpieza y una interlocución fluida, concreta y orientada a resultados y de análisis de datos con la autoridad sanitaria.

 

Javier Lacunza
Responsable de Baluarte
Vicepresidente de APCE